El 17 de julio se ha instaurado como el Día Internacional del Tatuaje. Es celebrado desde el 2016 en Estados Unidos como Día Nacional y extendido posteriormente al mundo. Desde los años 80, tatuarse se ha convertido en una práctica común y asequible para todos en nuestra sociedad. El oficio, hace mucho tiempo, que se especializó, se modernizaron las técnicas, y esto hizo, igualmente que se formalizaran los establecimientos y se reglamentara el ejercicio.
Aun así, la práctica de tatuarse existe desde tiempos inmemorables. El primer vestigio encontrado data de hace más de 5300 años de antigüedad. Un cazador del neolítico conocido con el nombre de «Oetzi», el cual presentaba tatuajes en espalda y rodillas. En Egipto, se descubrieron en 1900, dos momias que datan entre 3351 a.C. al 3017 a.C. A diferencia de los tatuajes de Ötzi, que tienen diseños más geométricos, los tatuajes egipcios son los ejemplos más antiguos conocidos de tatuajes figurativos.
¿Qué es lo que ha llevado al hombre, desde sus inicios, a implantar una marca imborrable en su piel? En principio, la piel es el componente del ser humano más externo, el que está en contacto con el ambiente, de allí que poner una marca en esta área expresa una necesidad intrínseca de exponer frente al mundo y la sociedad, una diferencia, algo que lo identifica como individuo, ya sea de su experiencia, por estatus social, su forma de pensar, rebeldía, idealizaciones políticas, entre otras.
«Se traducía como signo de honor: así
ocurrió con los tatuajes de los sacerdotes
y sacerdotisas egipcios, de carácter ritual»
Históricamente, el tatuaje ha sido usado entre los gobiernos con múltiples fines, entre ellos la impunidad, castigo o desvalorización. En la antigüedad grecorromana se marcaba normalmente una letra en la frente o entre los ojos, para identificar a los esclavos y a quién pertenecían, o a los delincuentes para indicar su crimen. El mismo uso se dio con el número tatuado en los brazos de los judíos internados en los campos de concentración nazi. El mismo fin cumplió en Japón como discriminación hacia los esclavos y los presos.
Sin embargo, hay culturas que lo usaban como forma de afirmación positiva dentro de su grupo social, de modo que un tatuaje se traducía como signo de honor: así ocurrió con los tatuajes de los sacerdotes y sacerdotisas egipcios, de carácter ritual; o con los «espantosos», en boca de Julio César, dibujos que ostentaban pintados en su piel los guerreros pictos británicos, hombres y mujeres, que luchaban completamente desnudos y cubiertos de tatuajes con un sorprendente color azul.
Entre las fuerzas guerreras que se tatuaban se reconocían en particular las tribus nómadas de los escitas, al este del mar Negro, cuya ideología guerrera se expresaba en diseños complejos y abundantes con serpientes, caballos, animales salvajes y fantásticos en actitud de lucha.
«Si tuviésemos la capacidad de ver
todas las impregnaciones, no tendríamos
la necesidad de re-marcar y re-forzar
nuestro karma en la piel»
A medida que el ser humano introdujo cambios en su lenguaje, pensamiento y comportamiento, el tatuaje avanzó por nuevos territorios adquiriendo diferentes significados. En los años 60 y 70 los hippies lo adoptaron como símbolo de rebeldía utilizando diseños coloridos acordes a la época. A su vez, subculturas como los Teddy Boy, los Bikers o los Hell’s Angels en la década de los 60’ y los Punk’s y los Skin’s en los 70 usaron el tatuaje como símbolo de desobediencia hacia las reglas de la sociedad, manteniendo así el deseo por comunicar información y creencias de manera no verbal.
A mediados del siglo XIX se había puesto de moda el tatuaje “¡Muerte a los reyes!”. Jaime y Juan de Borbón lucieron llamativos tatuajes, siguiendo así una tradición iniciada por los ingleses y un rey sueco que se tatuó “Muerte a los reyes”. El rey Federico IX de Dinamarca también se tatuó y no dudó en posar en una fotografía mostrando esta frase en su piel.
Sin lugar a duda el tatuaje ha sido una de las formas de expresión del ser humano más sostenida en el tiempo y que ha querido resaltar aspectos profundos de nuestras creencias y cultura.
«La ONU tiene más de 20 años con
un proyecto en Centroamérica llamado
-Borrón y Vida Nueva-«
Estas marcas que decidimos dejar en nuestra piel, no son más que un reflejo de las marcas producto de nuestras acciones. Existe en nosotros un tatuaje impregnado ya en aspectos más sutiles. Toda acción conlleva una carga que se impregna en nuestros campos energéticos y es la que realmente nos lleva a concretar en este plano físico esa misma marca ya existente. Tal vez si tuviésemos la capacidad de ver todas las impregnaciones, muchas arrastradas desde vidas anteriores, muchas casi que indelebles o sumamente complejas, no tendríamos la necesidad de re-marcar y re-forzar nuestro karma en la piel, más cuando ya se ha alcanzado el entendimiento del propósito de venir aquí para deslastrarnos de todas estas impregnaciones.
La ONU tiene más de 20 años con un proyecto en Centroamérica llamado «Borrón y Vida Nueva», ayudando a niños y adolescentes centroamericanos a borrar los tatuajes que los identifican como miembros de una mara, nombre genérico asignado a las pandillas de esa región. En más de un documental se encuentran los testimonios de personas que realizan este tratamiento a través de rayos láser, o de enfermeros que refieren la llegada de jóvenes que tratan de sacarse por su cuenta las marcas, a veces hasta con un cuchillo, sin importarles ni la sangre ni el dolor.
Este próximo día internacional del tatuaje podríamos celebrarlo diferente. Por un lado, reconociendo la memoria que hemos rescatado en esta y otras vidas, y que hemos decidido traer a nuestra piel, y también en intentar disolver esas marcas, no desde su aspecto físico, sino desde la disolución de su impregnación en nuestros aspectos más sutiles, para que la marca en la piel sea tan solo un bonito recuerdo de lo que hemos sido.
Fuentes consultadas La práctica del tatuaje y la imagen corporal. REVISTA IBEROAMERICANA DE PSICOLOGÍA: CIENCIA Y TECNOLOGÍA 8(1), 103– 109, JUNIO 2015. https://www.nationalgeographic.es/historia/2018/03/estas-momias-egipcias-tienen-los-tatuajes-mas-antiguos-del-mundo https://www.elcomercio.com/tendencias/sociedad/maras-tatuaje-pandillas-adolescentes-juventud.html http://www.agenteprovocador.es/publicaciones/el-borbn-tatuado
Hermoso cierre.
Excelente información!, no lo sabía!, muchas gracias , un conocimiento más que nos ayuda a ver con otros ojos realidades absolutas. Que bueno que a mis hijos nunca les llamó ni por curiosidad Los Tatuajes, agradecida por ello. ONS 🙏💥
Me pareció muy interesante el articulo.
Se lo compartí a mi hijo de 16 años, ya que tiene la idea de tatuarse por primera vez y se dio un lindo e interesante debate familiar.
Ni mis hermanos ni yo ni mi esposa poseemos tatuajes.
Excelente espacio para compartir y expandir ideas acerca de éste misterioso y milenario ritual de tatuarse la piel.
El tatuaje ha sido tantas cosas como nosotros, y el tatuaje puede ser tantas otras cosas, como nosotros.
Para el tatuado un diálogo interno, un mapa. Un recuerdo del futuro. Un lenguaje electromagnético de amor y una herramienta, si consciente, de transformación constante. Una serpiente que muda su piel. La sublimación por medio del ejercicio de crear. O crearse. Recrearse. Un arte, en el sentido alquímico de la palabra “ars”: la gran obra. Para el tatuador, la bendición de ganarse la vida con un oficio noble, dedicar tiempo y espacio para ofrecer sus manos e intelecto a la fuerza Universal de la transformación constante.
Muy informativo.
Gracias
Recuerde:La piel como porta voz de un mensanje social- politico!
Interesante artículo sobre todo lo de las momiasegipcias
Felicidades entonces a Jhonatan Ochando en su día
Muy buenos días.
Om Namaha Shivaya!
En mi experiencia cada tatuaje que tengo representa el propósito de obtener conocimiento y entendimiento para vivir la vida con sabiduría, en un principio me ha servido mucho ya que me retroalimento del significado que tienen para mi cuando observo mis quiebres internos. Así de esta manera la flor de la vida en mi pecho (conocimiento), la bandera de la paz en mi hombro izquierdo (los deseos mas elevados de la humanidad, amor y paz) ,el kultrun en mi hombro izquierdo (guerrero de la luz) , el ave fenix en mi espalda ( me recuerda la susesion de vidas ), el águila en mi pantorrilla derecha (la vision y sabiduria necesarias en el actuar diarios ) me recuerdan todo lo que he sido hasta este momento y me impulsan a alcanzar lo que quiero ser.
Muy interesante reflexion.
Que inadvertido e interesante punto de vista…¡Gracias!
Bert Hellinger, padre de las constelaciones familiares decía que el tatuaje era una forma de incorporar lo negado por el sistema familiar. Así una mariposa representa la capacidad de mutar, una flor – la dulzura y lo perfumado en la vida, un ancla – la necesidad de quedarse, una brújula – el deseo de saber a donde se dirige, Mickey Mouse (la celebración de la niñez?). Interesante manera del maestro Hellinger ???????? Saludos ONS