Sw. Dayananda | SKY Venezuela
En el siguiente escrito abordaremos en forma concreta dos formas preferidas que utilizan las élites o sociedades secretas que dominan este planeta. Pero primero puntualicemos dos conceptos:
Una sociedad secreta-élites es una organización que exige a sus miembros ocultar ciertas actividades, como los ritos de iniciación para los candidatos, o los objetivos de la misma. Se caracterizan por tener comportamiento psicótico. Controlan a través de las religiones. Idea principal: la salvación para hacernos sentir víctimas y controlarnos.
La programación predictiva es uno de los mecanismos preferidos, de estas élites o sociedades secretas. Está presente en películas de Hollywood, en diferentes escritos, en las profecías. Es una forma de manejar muy convenientemente “La ley del libre albedrio”, ya que esto les permite justificar la comunicación de sus pactos oscuros e insondables. Su base es el engaño. La mentira para ellos es necesaria. Les permite no violar la Ley del libre albedrío.
Ley Cósmica: Estas Leyes se aplican a todos cuando están encarnados o cuando están en el estado de existencia llamado “entre encarnaciones”. Son leyes que actúan, más en un estado de naturaleza como el magnetismo: lo similar atrae a lo similar. La ascensión es la meta de toda encarnación, es por ello menester que nos familiaricemos con estas Leyes Divinas, y que, por encima de todo, las apliquemos a nuestros diarios quehaceres.
Ahora bien, ¿estamos ante una realidad que hemos creado? ¿Lo que vivimos en la actualidad es nuestra elección?
Cada día que pasa y junto con todo los que se ha ido revelando con esta pandemia, toda esta medida de confinamiento lo que ha generado en un alejamiento social sistemático, la implementación del miedo no solo a contagiarnos con el virus, sino el miedo a la muerte. Queda en evidencia que este nivel de intervención solo es posible en parte porque lamentablemente en estos momentos la ignorancia en una fracción de la humanidad sigue siendo una realidad (independientemente de todos los avances de los que podamos alardear), ya que esto es lo que permite la acción de la oscuridad siendo “la omisión el consentimiento implícito”, y ellos lo saben muy bien.
La operación psicológica perfecta ha sido “La Ideología del Salvador” creada para esclavizar la mente, para propiciar la mirada hacia el exterior, no mirar hacia nuestra riqueza interna y el problema es que cuando no discernimos, creemos ciegamente, no cuestionamos y eso hace que aceptemos los términos del contrato.
Fragmentación y unificación
La especie humana en estos momentos se enfrenta a estos dos futuribles, entendiendo que hay formas de salida, pero uno de los aspectos más delicados es que, si en forma muy oculta estamos de acuerdo, “la luz no puede intervenir” y esto forma parte de la Ley Cósmica.
Una de las formas espirituales más poderosas es nuestra conciencia para poder detener las fuerzas de la oscuridad. Cuando somos conscientes podemos decir NO.
Formas de salida: En el sendero que hemos decidido caminar en forma consciente y amorosa ante nuestro despertar, nuestra Gurú nos ha guiado en estas formas de salida, en la aceptación de nuestra riqueza interna, el desarrollo de la virtud del discernimiento, no solo la búsqueda de la verdad sino su aceptación para el desarrollo de un verdadero conocimiento sobre todo interno y así poder curar la ignorancia. Solo así podemos empezar a convertirnos en agentes de cambio, siendo el kriya y la meditación parte de nuestras herramientas de luz.
Ante la pregunta planteada al principio del escrito lo más sensato es aceptar la parte que corresponde a nuestra responsabilidad ante esta nefasta intervención de la oscuridad. Como humanidad hemos decidido permanecer ocupados haciendo lo que la matrix nos demanda y en ese sentido la sobrevivencia se lleva la mayor fracción, amén de los que prefieren dispensar su energía en la acumulación de riquezas materiales entre otras, siendo así como una especie de red de energía que alimenta este poder.
Sin embargo, estamos en momento definitorios, en los que debemos decidir qué camino transitar. La oscuridad insondable no puede ni debe quebrantar la ley, y nosotros tampoco. La ley Cósmica nos permite jugar limpio y claro y nuestra posibilidad de Unificación es una realidad, y para ejemplo vivo nuestra Maestra.
De manera que estamos en la plena libertad; en primer lugar de dejar de jugar a la operación psicológica del salvador, en segundo lugar, ser conscientes y creer en la Ley cósmica y sentirnos en respaldo por ella y en tercer lugar, asumir en forma absoluta la responsabilidad de nuestra evolución personal y espiritual.
Así podremos hacer frente con mirada muy atenta a este juego nefasto que ya empezó y que promete no parar.
Om Namaha Shivaya