Sholem Aleijem, escritor, periodista y humorista judío ruso, nació en Pereiaslav, Ucrania, Imperio Ruso, el 2 de marzo de 1859, en el seno de una familia acomodada, luego empobrecida. Dice que su primer escrito fue la lista de apelativos que usaba su madrastra. Inspirado en “Robinson Crusoe”, escribió su propia versión judía a los 15 años, decidiendo ser escritor y adoptando el pseudónimo Sholem Aleijem que significa literalmente el saludo “la paz esté con vosotros”.
En un principio escribió en ruso y en hebreo, pero a partir de 1883 escribió en yiddish o judeoalemán. Trabajó como corresponsal del semanario polaco Ha-Tsefirah, escribió para el Ha-Melits y otras dos publicaciones rusas judías. Fue designado “rabino de la corona” por tres años, cargo creado para intermediar entre el gobierno imperial y la comunidad.
Su primera publicación fue “Dos lápidas” (1883). Utilizó su fortuna para promover escritores en yiddish a través de “La Biblioteca Popular Yiddish” que editó en 1888 y 1889, no pudiendo continuar al caer en bancarrota. Desde 1905 trata de levantar a su familia entre los EEUU, donde no le va muy bien, y Europa, donde recibe ayuda de amigos.
Su obra, ampliamente traducida, consta de más de 40 volúmenes de cuentos, novelas, dramaturgia, literatura juvenil, ensayo y autobiografía. El libreto para el musical “El violinista en el tejado” (1964 y en cine 1971), vigente hasta nuestros días, es una adaptación de varias de sus historias sobre Tevye “el lechero”.
Llamado el “Mark Twain judío” por sus similitudes, Twain pidió ser llamado el “Sholem Aleijem estadounidense”. Aleijem y su legado son un clásico, un símbolo del pueblo judío y su supervivencia. Murió el 13 de mayo de 1916 y fue despedido con el funeral más grande realizado en Nueva York.