Mientras más etiquetas ostenta el ego, más vivo se siente
Swami Shivananda
Existen al menos dos universos que nos competen directamente a los seres humanos; el universo consciente y el inconsciente.
El consciente es el universo de la luz, el amoroso, el que está en ley divina, que a su vez genera un horizonte de sucesos armonioso con el Ser. Un universo vivo regido por la esencia primordial que se expresa en él y que a su vez, lo utiliza como vehículo de sincronismos para que los humanos despiertos vayan trazando la senda a transitar por sus consciencias en ascensión y que estas poco a poco se integren, se fundan con la sustancia primordial tan amorosamente llamada por muchos “El Padre”.
“Me gusta este tipo de comida, simpatizo con
tal actividad, con tal equipo deportivo y así
innumerables diferencias, que en la sumatoria
final, son el gran caldo de la percepción…”
Por otro lado existe el universo inconsciente, el que está sumido en un sueño profundo, el que permite la acción de las fuerzas contrarias a la luz y que en épocas anteriores, fue requisito indispensable para la experimentación humana. Este universo inconsciente, al contrario del primero, genera descomposición, disgregación y desintegración y produce como resultante la percepción de individualidad en los seres dormidos, lo que vendría a ser lo opuesto a la unificación de la Consciencia.
Una de las aristas de acción del este universo inconsciente son las etiquetas; soy blanco, soy negro, soy alto, soy bajo, tengo determinados talentos físicos, otros determinados talentos intelectuales, me gusta este tipo de comida, simpatizo con tal actividad, con tal equipo deportivo y así innumerables diferencias, que en la sumatoria final, son el gran caldo de la percepción de individualidad que impera en la tierra.
“Hoy se puede ser anarquista, conservador,
comunista, biorregionalista, ecosocialista,
feminista radical, ordoliberalista, agorista, republicano…”
Hoy en día no solo hay completa vigencia de las etiquetas de siempre sino que las formas de control que dominan el planeta (con la complicidad del humano dormido, por supuesto) han llevado esto a niveles sorprendentes de etiquetado sobre etiquetado, creando términos complejísimos para validar e inclusive crear complicadísimos registros sexuales, por ejemplo, divididas hasta en más de una veintena y que por cierto, la mayoría se solapan entre ellas.
También, una persona según su dieta puede ser carnívora, crudivegana, vegana, vegetariana o celíaca y a eso le puedes agregar una dieta secundaria circunstancial como por ejemplo keto, dash o paleo según el caso.
Antes las personas podían ser afines a sistemas políticos de derecha, de izquierda o de centro mientras hoy se puede ser anarquista, conservador, comunista, biorregionalista, ecosocialista, feminista radical, ordoliberalista, agorista, republicano, batallista, paleoconservador, agrarista, demócrata cristiano, mutualista, neofascista, maoista, rexista, tecnócrata, eurocomunista, guevarista, pancatalanista e inclusive anarcosindicalista.
Es un hecho que el etiquetado responde a una acción concreta del universo inconsciente. Y lo que es peor, todo este oscuro proceso obedece a una antigua máxima de tiempos inmemoriales que definió la existencia de crueles conquistadores y a su vez fue empleada y popularizada por el mismísimo Maquiavelo; Divide y reinarás.
Fuentes:
-Wikipedia.
-https://www.cocinavital.mx/blog-de-cocina/tips-de-salud/dietas-en-tendencia/2018/04/
Gracias por remarcar todo esto que es tan cierto. Nos distraemos con banalidades que no hacen más que distanciarnos. Lo dijo Maquiavelo mejor que nadie en la frase que citaste al final. ONS ♡
Que divertida y a la vez profunda manera de escribir Kike. Gracias! ONS!
Y además de lo que no nos damos cuenta es que en ese etiquetar creemos firmemente que somos eso, lo que nos coarta para quedarnos en silencio y comprender que somos no solo mucho más que eso, sino perfectos hijos de ese que llamaron El Padre. Significa que si rompemos con todas esas creencias que, generalizando, la sociedad nos inculca, descubriremos un mundo infinito de posibilidades.
Gracias