Emperatriz rusa.
Isabel Petrovna Románova nació el 29 de diciembre de 1709 en Kolómenskoe. Fue la segunda hija de emperador Pedro I y Catalina I. Después de la muerte de su padre el trono pasó por varios miembros de la familia, incluyendo a su madre, sobrinos y primos; finalmente subió al trono tras derribar al niño zar Iván VI en un golpe que no tuvo derramamiento de sangre. Se autocoronó el 25 de abril de 1742.
Realizó numerosas reformas: abolió la pena de muerte, estableció el Senado, creó un Consejo político supremo, suprimió las aduanas internas, fundó la Universidad de Moscú y la Academia Imperial de las Artes y reorganizó el comercio interior, por esto fue llamada La Clemente; sin embargo, amplió los poderes de la nobleza (restringidos por Pedro I de Rusia), lo que hizo empeorar las condiciones de vida del campesinado.
Lideró la guerra de los 7 años, en la que casi acabó con Prusia. Su muerte, el 5 de enero de 1762 en el Palacio de San Petersburgo, es conocida como el Milagro de la Casa de Brandenburgo.